miércoles, 20 de octubre de 2010

ZP reconoce haberlo hecho todo mal

Cuando en pocos meses Zapatero ha tenido que hacer una reforma laboral, reformas económicas (aunque se lo hayan tenido que imponer) y echar del gobierno a casi todos los ministros que la opinión púbica y la oposición reclamaban, para mí está reconociendo de manera implícita que lo ha hecho todo mal. Al fin y al cabo, las últimas decisiones son las que validan o invalidan las anteriores. Y que luego digan que la oposición no ha cotribuído aportando ideas para solucionar la crisis...
A pesar de que Bibiana siempre ha defendido su Ministerio alegando "lo barato que es", prácticamente a todo el mundo (incluída la izquierda), le parecía una cartera inútil y meramente decorativa. Vivienda nunca sirvió para gran cosa, ni tiene prácticamente competencias. Moratinos no debió de cumplir ni un año como ministro, porque no ha conseguido resolver ninguno de los conflictos exteriores que ha pasado España. A lo mejor lo cambian para excusarse por el tiempo de transición el no hacer nada con respecto a Venezuela y sus funcionarios-etarras. De la Vega resultaba desagradable a casi todos. Y de Corbacho, mejor no hacer comentarios. Todas estas destituciones eran muy lógicas, excepto para la tozudez (o no quiero pensar qué otra circunstancia) de Zapatero.
Pero en mi opinión se ha quedado corto. Debería haber suprimido también Ciencia y Tecnología y destituido a Sinde... Por cierto que, como a ella, hoy la gente está recibiendo ya a patadas a Pajín como ministra de Sanidad cuando todavía no ha tomado posesión (sobre todo hacen hincapié en el patético ejemplo de lucir una pulsera Powerbalance). Razones no faltan.
Y de jefe en la sombra queda el de siempre. Rubalcaba. Dicen que puede ser el siguiente candidato. Yo no lo creo. Es demasiado inteligente como para quemarse gratuítamente en unas elecciones que el PSOE tiene más que perdidas. Y es triste pensar cómo lo tendrá que estar haciendo el Gobierno para que el portavoz del GAL y embaucador para lo que haga falta sea el ministro mejor valorado y más preparado del Ejecutivo. ZP terminará de inmolarse en 2012.
A pesar de todo, es evidente que a estas alturas esta reforma no sirve absolutamente para nada. Sólo convencerá a algunos incondicionales, que verán en esto un gesto de iniciativa o al menos una "medida adecuada". No es más que otra cortina de humo para que esta mañana no se hablase ni de los desastrosos Presupuestos Generales del Estado ni de los vergonzantes pactos con nacionalistas que fueron necesarios para que se pudiesen aprobar. Me preocupa que después de utilizar el fútbol, la foto de Obama, el sacrificio de Garzón (y guarda en la manga los nuevos coqueteos con ETA), Rubalcaba y Zapatero se van a quedar sin ideas para distraer la mirada pública la próxima vez que les haga falta.